Estimados Reyes Magos de Oriente:
Sé que es un poco tarde para enviarles mi carta pero como ya saben, porque son Magos, que he tenido una serie de dificultades que me han impedido que mi carta llegue a tiempo a Oriente.
Tranquilidad porque este año no deseo que me traigan nada material como regalo, así lo he decidido. He estado meditando mucho por el día, por la tarde y por la noche desde el año pasado y he estado observando el comportamiento de toda la gente que se ha cruzado en mi camino desde Enero hasta Diciembre y he llegado a la conclusión, de que no necesitamos nada material sino que más bien hace falta que vengan cargados de humildad, porque a la gente se le olvida muchas veces que la humildad hace grande a las personas y que es la base de la grandeza del ser humano; generosidad, para que sean capaces de saber ayudar al prójimo cuando lo necesitan y que se olviden de pensar en ellos mismos siempre; un poco de sentido común y saber estar para actuar siempre de una forma coherente y lógica; amabilidad para saber tratar a las personas siempre con una sonrisa; madurez porque todos vamos teniendo una edad en la que no queremos juegos tontos y no estamos dispuestos a aguantar tonterías infantiles ni enfados de la gente; respeto por las opiniones de los demás cuando no son las mismas y comprensión con los sentimientos y las opiniones de los demás porque sabemos que hay personas que pueden estar mal y necesitan del apoyo de los demás o un poco de espacio y debemos comprenderlo por si alguna vez lo necesitamos nosotros.
Y quiero, por favor, que se lleven bien lejos la hipocresía, mucha gente finge opiniones, creencias o cualidades que no tienen o que no comparten por el simple hecho de querer satisfacer a los demás. Odio cuando la gente esconde sus sentimientos reales y siempre quiere estar bien con todo el mundo y saben que eso es imposible. La gente que te apuñala por la espalda y luego hace como que no ha pasado nada, no me gusta y encima se comportan de manera natural.
Ya saben que he sido buena, lo ven todo, y no le he hecho el mal a nadie así que, por favor, creo que si ayudan un poco con estas características el mundo se volvería mejor y habría menos problemas.
En fin Majestades, nada más que añadir, solo desearles una cálida noche, un saludo y muchas gracias,
Leticia.
P.d: Venid abrigados porque hace frío, no os pongáis enfermos.